En su lucha contra el individuo, la sociedad tiene tres armas:
ley, opinión pública y conciencia
William Somerset Maugham
Después de siete meses de haber tomado protesta como integrantes de la XV Legislatura de Quintana Roo, y luego de convertirse en los diputados más cuestionados en la historia local, este miércoles se presentará la agenda legislativa que mostrará las acciones que los legisladores quintanarroenses realizarán en los poco más de dos años que les quedan de gestión, documento macro que permitirá ver los cambios de fondo planteados para la modernización normativa del estado; porque hasta ahora se han visto como “más de lo mismo.”
Ya sea por una marginada libertad de expresión o por intrascendencia en la gestión, pero ninguna legislatura quintanarroense ha sido tan cuestionada como la XV, a pesar de que es la primera en que los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) tienen el control administrativo desde la Gran Comisión. Vaya, ni los legisladores que les antecedieron fueron tan cuestionados, y eso que fueron los responsables de aprobar el llamado “paquete de impunidad” con el cual el ex gobernador Roberto Borge Angulo pretendió evadir la acción de la justicia.
Por simple cuestión de tiempo, la XIV Legislatura fue “metrallada” durante tres meses, de junio a septiembre, cuando sesionaron incluso a escondidas para imponer a un fiscal y un auditor a modo, y modificar diversas normas que “aligeraban” las sanciones por delitos tales como uso irregular de recursos públicos; pero la XV Legislatura lleva ya siete meses cometiendo error tras error, los cuales le han sido señalados, pero además los legisladores han exhibido una voracidad sin precedente en el discrecional uso de recursos públicos para la comodidad de los “esforzados” diputados que, aun cuando no logran dar rumbo a su gestión, si se han asignado en contraparte miles de pesos en vales de gasolina, renta de lujosas residencias, renta de camionetas, uso indiscriminado de vuelos de avión, a pesar de que el gobierno estatal ha decretado un estricto programa de austeridad.
Pero eso ha sido sólo el preámbulo de lo que será el verdadero legado de la XV Legislatura, pues el documento que se comprometieron a presentar antes del 15 de marzo mostrará las modificaciones normativas a realizarse y que, se supone, contribuirán con el gobierno de Carlos Joaquín González a darle gobernabilidad a la entidad y mostrar un verdadero cambio con respecto a los gobiernos anteriores, por ello es que será fundamental también conocer los plazos y tiempos que asignan a cada reforma por realizarse; por ejemplo, la desaparición de la Gran Comisión del Congreso del Estado, la autonomía a la Universidad de Quintana Roo, una nueva reforma electoral; una ley de movilidad que atienda finalmente el tema de Uber y los sindicatos de taxistas; una modificada ley de participación ciudadana que permita incidir realmente en las decisiones gubernamentales mediante consultas públicas realizables y sencillas; entre otros.
A todo lo anterior deberán sumarse también las propuestas de la oposición, pues el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Verde Ecologista (PVEM) han aseverado propondrán la eliminación de los diputados plurinominales –cuestión que estaría sujeta a la aprobación nacional que determina constitucionalmente la composición de los congresos-, pero por ello toca a todos los ciudadanos estar atentos a los tiempos, al ordenamiento prioritario de la agenda, porque los temas de interés ciudadano suelen colocarse en un segundo orden, y aquellas que implican pérdida de poder –como la desaparición de la Gran Comisión o la reducción en la cantidad de diputados- también suelen colocarse al final para que afecten a las legislaturas futuras, no la actual (faltaba más).
Recapitulando, estemos todos atentos para ver si la agenda que se presente es realmente innovadora, si fue realmente incluyente de las demandas ciudadanas, si los temas que se presentan inciden en un cambio social de fondo, si las prioridades de las iniciativas atienden a los intereses de los gobernados y no de los partidos; y en suma, si la XV Legislatura recompone su lamentable inicio o si termina siendo –como se ve- más de lo mismo; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.
P.D. Por cierto, los juicios políticos y las acciones contra el “pasado” deben ser complementarias y no integrantes de la agenda, por ser factores exógenos que imponen a los diputados acciones a realizar.
Como siempre, le dejo notas que fundamentan lo expresado.